El trapillo me ha recordado que es muy útil un poco de disciplina para todo.
Hoy me han pedido un cuenco de trapillo que me hice para los mandos de la tv, aquí lo podéis ver.
Pero resulta que lo hice sin patrón.
Sin pensar casi.
Y cuando me he puesto, manos a la obra a crear otro igual... he tenido que deshacer y hacer un par de veces... jejejejeje... y no ha quedado igual.
Sólo en estos momentos me da un poco de rabia no ser más disciplinada.
Me hubiera gustado encontrar un patrón hecho por mi... pero... no lo tengo.
La improvisación forma parte de mi.
Lo acepto.
Pero me gusta el resultado del nuevo.
Me encanta que cada pieza que hago sea única...jejejejeje
Ninguna igual. ( básicamente porque es imposible, al menos con el trapillo).
Y os enseño un proyecto de pastel de chuches que tengo entre manos.
Me pidieron si podía buscar un pastel para una fiesta de cumpleaños.
Sinceramente, pensé en comprarlo hecho, pensando que encontraría una ganga.
Pero cuando descubrí los precios y que parece que algunos están hechos hace mucho tiempo... me decidí a crearlo yo misma. Con chuches frescas.
He moldeado un poco el porexpán que tenía en casa.
He comprado un kilo y medio de chuches.
Y haré una súper tarta de dos pisos al mismo precio de una tarta chiquitita de las tiendas.
Os enseñaré el resultado muy pronto.
Besos